Finalmente el TSJ obliga a Eurest Compass Group a aplicar el convenio del Sector Social a las trabajadoras de Comedores Sociales del Ayuntamiento de Barcelona, organizadas en CNT.
Esta reivindicación supone el pago de casi 20.000€ sumando las cantidades adeudadas a las compañeras del sindicato, así como incluso el incremento de 150 a 500€ brutos mensuales.
Desde la sección sindical de CNT hemos defendido ésta reivindicación desde 2021. Pues bien, después de que la empresa se negase a cumplir con lo que tanto el pliego de condiciones -contrato- del Ayuntamiento, así cómo lo que ya establecen de por sí los convenios, es decir, la legalidad, nos vimos obligadas a inscribir denuncia.
En 2023 ganamos el juicio en el juzgado de lo social, pero Eurest Compass Group, empeñada en seguir incumpliendo la distinta normativa legal y seguir embolsándose la diferencia salarial: recurrió al TSJ, perdiendo una vez más, con una contundente sentencia y siendo condenada a pagar las costas.
Hay que señalar, y es de extrema gravedad, que el Ayuntamiento de Barcelona incluye en su presupuesto los sueldos de las trabajadoras conforme al convenio de Acción Social, así lo expresa en el mismo contrato con la multinacional y así queda más que constatado teniendo en cuenta que hablamos de presupuestos de más de 3 millones de euros para la gestión de ambos comedores que salen juntos en el mismo concurso: Navas y Paral·lel.
¿Dónde se ha estado destinando éste dinero público si no era a las nóminas de las trabajadoras? Recordemos que Eurest Compass Group es propiedad del fondo buitre BlackRock, el mismo que hace poco ha estado acusado de destinar más de 33 mil millones en la masacre al pueblo palestino. ¿Estará ahí el dinero público que Compass Group no destinaba a las trabajadoras?
Los casi 20.000€ que ahora debe abonar la empresa a las trabajadoras de CNT, tan sólo cubre las cantidades adeudadas desde un año atrás a partir de la inscripción de la denuncia – inscrita en 2022- ; pero, lo cierto es que la empresa lleva mucho más gestionando ambos comedores y ahorrándose éstos salarios, concretamente: 10 años, mínimo. ¿Dónde está el resto de dinero que se ha adeudado a la plantilla del sector social que ha trabajado o continúa trabajando en los comedores gestionados por Eurest? Insistimos, está en el genocidio en Palestina? Está en los bolsillos de la patronal?
Con éste caso se vuelve a abrir la eterna pregunta sobre la capacidad y verdadera voluntad de las administraciones a la hora de externalizar los servicios sociales. Pues queda clara la capacidad que incluso un Ayuntamiento, del tamaño y capacidad cómo es el de Barcelona, tiene realmente por controlar qué se hace y a dónde va realmente el dinero público que paga la misma clase trabajadora.
Un ayuntamiento que aún pasando por distintos colores políticos (de Trías a Colau o Collboni actualmente), nos demuestra su constante incapacidad e hipocresía, pues mientras trata de vendernos falsamente cierto interés en las condiciones de vida de la clase trabajadora o los derechos de las mujeres: resulta incapaz de controlar qué se hace con el dinero público que debería ir destinado a las trabajadoras, en un sector, además, tan feminizado cómo es el sector social.
Vemos, una vez más, que no se trataba de “votar bien”, que los partidos políticos, vengan de donde vengan, sólo tratan de mantener sus privilegios, y también los beneficios de las multinacionales, según parece.
Pues una vez más, ha sido la actividad sindical, la organización de las trabajadoras y la solidaridad entre nosotras, lo que ha hecho posible mejorar nuestras condiciones. Nada más.
Seguiremos informando acerca de éste tema pues la situación que ha generado Eurest Compass Group y las responsabilidades políticas que se derivan son bastante más extensas.
A su vez, seguimos con las acciones que venimos realizando dentro del conflicto sindical actual, por la readmisión del delegado sindical en el Tanatorio Sancho de Ávila (Grupo Mémora), despedido en un claro caso de represión sindical, y la aplicación de los acuerdos entre empresa y CNT.
Nos hemos comunicado vía burofax tanto con la empresa como con el Institut Municipal de Serveis Socials (Ayuntamiento de Barcelona), quienes una vez más, pese a haber recibido comunicación por parte de CNT, continúan mudos ante los incumplimientos del contrato público así cómo de los derechos de las trabajadoras. También hemos inscrito denuncia ante Inspección de Trabajo respecto a la situación en el Comedor Social de Navas, cómo también hemos comunicado a ambos.
Ante el silencio que mantienen, cómo ya hemos comunicado de forma directa a ambos responsables, continuaremos con las acciones sindicales y jurídicas.
Si trabajas en Eurest o en cualquiera de las empresas de la multinacional Compass Group, tú herramienta es CNT.
Sin liberados, sin subvenciones, con compromiso y principios.
Contáctanos: seccio.eurest@barcelona.cnt.es
Instagram y twitter: @eurestcntbcn
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